El problema de las pandillas en Barranquilla lamentablemente es creciente. Eso lo corroboran estudios realizados por entidades del Gobierno así como los ciudadanos que habitan en los barrios más críticos donde se da este fenómeno delictivo (ver infografía).
En algunos sectores del sur de la ciudad, como lo ha registrado EL HERALDO, han llegado a decretar hasta ‘toque de queda’. Asimismo, la guerra por el territorio ya deja decenas de víctimas inocentes que quedaron en la mitad de las confrontaciones que se dan a cualquier hora del día.
Según Guillermo Polo Carbonell, consejero Distrital para la Seguridad y Convivencia, hasta el momento hay 41 grupos identificados. Afirma el funcionario que ya hay un “norte claro” para afrontar la problemática, en donde la prevención va ligada con la creación de oportunidades para los que integran las pandillas. Esta opinión la refuerza la secretaria de Gestión Social del Distrito, Karen Abudinen.
Al mismo tiempo, la Policía hace esfuerzos operativos por combatirlos con mano dura y también trabajo social. El intendente Asprilla da testimonio de eso con sus 12 años reintegrando a la sociedad a muchachos con problemas. El mejor ejemplo es Jesús M. Torres, exmiembro de Los RR del barrio La Luz.
Para los cuatro, sí es posible dejar atrás la pesadilla social del pandillismo. Todos concuerdan en que la unión de toda la sociedad y medidas efectivas se constituyen en el único camino posible
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